Karime, voto en blanco

El uso electorero de la justicia debería ser sancionado de manera ejemplar, pero como las costumbres se hacen leyes, pareciera que ahora se permite esto y más, aunque se caiga en el terreno de los excesos.

La estrategia estaba creada desde la casa de gobierno de Veracruz para no dañar a nadie. Incluso podría pensarse que la acusación contra Karime Macías desde el gobierno de la entidad estaba negociada.

Porque Karime está en Londres desde abril de 2017, poco más de un año conociendo el terreno, pero sobre todo arreglando el papeleo necesario para convertirse en una perseguida política y no en una prófuga de la justicia, perseguida por delitos comunes.

Esto lo sabía Miguel Ángel Yunes y ganó tiempo. Ganar tiempo le beneficiaba en dos sentidos, el primero porque podría jugar al policía y al ladrón con Karime sin hacerle daño, sabía que podía alcanzar la impunidad en cuanto la esposa de Javier Duarte acreditara su estatus de perseguida política y eso era sólo cuestión de meses.

Ya con el expediente avanzado, Yunes Linares fue por el segundo objetivo: llegar al tiempo de campañas de su hijo para utilizar la persecución de Karime como factor político y así hacer creer al electorado que cumple con la promesa de campaña de atrapar a los cómplices del gran robo del exgobernador, en los primeros seis meses de gobierno. Ya casi acaba su gestión, y desde las alturas del poder estatal Miguel Ángel Yunes Linares, coloca a Karime como trampolín para que los veracruzanos voten a favor de su hijo del mismo nombre, pero de apellidos Yunes Márquez.

El equilibrio estaba planeado sin daños, y la trampa tendida a los electores, pero esto se salió de las manos, sobre todo de las del gobernador, que no contaba con la presión de los mexicanos en Londres, que no son pocos ni aisladas las quejas contra quien llaman simplemente ladrona, en inglés y español.

Mexicanos en Londres se pusieron a buscar a Karime Macías, con panfletos en los que se lee: Se busca Karime Macías de Duarte.

Ya Miguel Ángel Yunes Linares había dado a conocer que Karime vivía en un barrio exclusivo de Londres, los ciudadanos repartieron los volantes a los residentes de la lujosa mansión Willbraham, donde ella reside, según informó El Universal.

En una carta dirigida a los vecinos del edificio se lee: “Se busca Karime Macías de Duarte” junto con tres fotografías, en una de ellas aparecen todos los miembros de la familia y el teléfono de la Interpool.

“Esta mujer participó plenamente de la red de corrupción que ella y su esposo entretejieron. No sólo se robaron dinero público. DIERON MEDICINA FALSA A NIÑOS CON CÁNCER, reemplazando sus quimioterapias con agua destilada. La Interpool la está buscando. Si la ve, llame al tel. +33472447163″.

El lunes pasado Yunes Linares, reveló que Karime Macías vive en Londres, Inglaterra derrochando los recursos que se llevó ilegalmente de los veracruzanos. Pero el derroche no es delito, si no el propio gobernador estuviera detenido.

El gobernador solo quiere darle reflectores un mes a Karime, y una vez que haya pasado la fecha de las elecciones, abandonarla a su suerte, sin más interés que el de llevar a su hijo a su puesto, en una sucesión que tiene más de dinastía monárquica que de práctica democrática.

Si logra que la atención de los electores se fije en la figura de Karime, de aquí al 1 de julio, podría ganar su hijo las elecciones. Pero algo que no tomó en cuenta fue la memoria y la inteligencia de los veracruzanos que, aunado a su mal desempeño al frente del gobierno, lo colocaría como un simple oportunista que maneja las leyes a su favor.

Pero aquí no terminan las adversidades de Yunes Linares, porque si el trato consistía en que podía meter las narices en la vida de Karime en Londres sin que pasara nada, ahora la presión de los mexicanos que viven en esa ciudad podría ser suficiente motivo para que todo el papeleo de Karime para hacerse ver como una perseguida política se vaya al cesto de la basura.

Yunes Linares tiene en el caso de Karime una navaja de dos filos, pero hubo variables que el plan del gobernador no tomó en cuenta: el primero la suspicacia de los veracruzanos; el segundo, la presión de los mexicanos en Londres.

Con el primero lo único que logró fue que los electores se dieran cuenta de que se trataba de una estrategia electoral y no legal; con el segundo, deja sin efecto el posible acuerdo sobre la inmunidad de Karime, que muy probablemente haya negociado y que puede caerse en cualquier momento si siguen las expresiones de inconformidad entre los vecinos de Karime y los mexicanos en esa ciudad.

Karime Macías, interpuso una demanda de amparo en contra de su detención y solicitud de extradición que pudiera buscar concretar la Fiscalía General del Estado de Veracruz. Esto tendrá que ser resuelto por el titular del Juzgado Sexto de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México.

La defensa de Karime Macías señaló ante el Poder Judicial de la Federación que combatirá cualquier “citación, orden de comparecencia, orden de aprehensión o detención provisional con fines de extradición” que pudieran emitir jueces de Veracruz a solicitud de la Fiscalía estatal.

El gobernador, siempre mostrando sus dotes de investigador privado, informó que la sospechosa fue ubicada en el número 10 de Wilbraham Place, en Belgrave, uno de los barrios más lujosos de Londres.

La residencia en la que vive Karime Macías y sus hijos se encuentra a un kilómetro del Palacio de Buckingham, donde habita la Reina Isabel de Inglaterra.

El gasto mensual de Karime es de 60 mil libras; un millón 620 mil pesos mexicanos, aproximadamente.  Precisamente la abundancia que exigió al destino obtener.

De acuerdo con el fiscal de Veracruz, Jorge Winckler, Karime Macías desvió recursos del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia de Veracruz para pagar contratos de compraventa de por lo menos seis empresas fantasma.

Las responsabilidades de Karime Macías se difunden profusamente mientras las encuestas de intención del voto van dejando abajo al hijo del gobernador, cuya estrategia electoral parece haberse atascado. Puede que traigan a Karime a México y la procesen y muy posiblemente pierda su hijo la gubernatura. PEGA Y CORRE. – De nuevo el tema de la recompensa hace ver a Veracruz como un pueblo del viejo oeste, cuando los delincuentes eran buscados vivos o muertos, y eran culpables sin juicio de por medio, esta vez va contra Margarito Reyes Ferto, implicado en el robo de una camioneta de valores, y por cuyas pistas ofrecen un millón de pesos. Hay mucho para recompensas, pero poca justicia… Esta columna se publica los lunes, miércoles y viernes

 

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