“La demagogia es la capacidad de vestir las ideas menores
con la palabras mayores.” – Abraham Lincoln.
Sin lugar a dudas el INE se anotó un excelente resultado con la preparación y ejecución del Primer Debate entre candidatos a la Presidencia de México.
Un formato totalmente distinto, a los monótonos, rígidos y ya muy cacareados debates de antaño, la reestructuración y manejo del debate gusto a la ciudadanía que se dio cita frente a su televisión y su dispositivo móvil.
Aun cuando habrá que señalar que el formato es perfectible de mejorarse, y también de facilitar un poco más sus reglas que para muchos nos resultaron un poco confusas.
Lo cierto es que el desempeño de los moderadores Denise Maerker, Azucena Uresti y Sergio Sarmiento fue estupendo para darle vivacidad a la confronta de ideas, y por supuesto a inquirir y cuestionar a los candidatos.
De esta manera, pudimos confirmar que algunos de los candidatos simplemente están en la contienda porque buscan distraer la atención del electorado y otros muestran claras y definidas posturas respecto a los temas nacionales.
Quizá quien quedo mucho a deber fue el favorito de las encuestas, que como ya es de todos conocido muestra cierta lerdez en eso de estructurar ideas de corrido, sumado a su ya inexplicable comportamiento por negarse a responder cuestionamientos directos.
Así entre ocurrencias de Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” quien soltó la propuesta de cortarles literalmente la mano a los corruptos y ladrones dentro del ejercicio de la función pública, o el afirmar que retaba a renunciar a Andrés Manuel López Obrador del dinero público, caminó el debate.
Propuestas concretas y solidas de quienes ya se sabía que presentarían las mismas como José Antonio Meade y Ricardo Anaya, quienes exhibieron que al menos en eso del debate y el uso de tiempos para estructurar ideas, la tienen más clara que el tabasqueño.
Lo cierto también es que, este debate, permitió mostrar el poderío de las redes sociales, estos nuevos instrumentos de comunicación inmediata, que hacen posible el acorte de las distancias.
El trafico en la red, fue verdaderamente impresionante, así como la agilidad del mexicano para mofarse de todos y de nada con la creación de los famosos Memes.
Según ha reportado ya el Instituto Nacional Electoral (INE) el debate fue seguido en Facebook por más de 2.3 millones de usuarios, en Twitter por 850 mil, a través de Periscope, y en YouTube por más de 188 mil personas.
Según el INE los hashtags utilizados, #DebateINE, #DebateDelDebate y #Debate2018, tuvieron más de 659 mil menciones durante las dos horas que duró el ejercicio.
Cuán grande fue la expectativa del Debate que más de mil 600 personas acudieron al mismo entre representantes de las candidaturas, invitados, funcionarios del INE y medios de comunicación, algo insólito para una discusión presidencial.
Ahora bien, ¿Quién ganó el debate?, ¿Qué propuestas fueron las mejores?
La realidad es que solo usted tiene esa mejor determinación, habremos quienes opinemos diferente, pero en los hechos, el ejercicio democrático si permitió comenzar a esclarecer muchas dudas que al final si deberán ser tomadas en cuenta a la hora de decidir.
Lo cierto es que mientas más elementos tengamos los ciudadanos para la toma de decisión final será de suma importancia, pues lo que se esta en juego es el futuro o el retroceso de México.
Pero lo reitero al final, solo usted tiene la mejor decisión.
Al tiempo.
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