Notiver es un periódico que se ha ganado cada lector a fuerza de palabras

Notiver es un periódico que se ha ganado cada lector a fuerza de palabras

 

Notiver es el ejemplo de un medio de comunicación que puede sobrevivir sin andar pidiendo “chichi” al gobierno. Es el único periódico en Veracruz que vive de sus ventas y de sus espacios publicitarios. Pero sobre todo esto Notiver es un periódico que tiene su estilo propio, un estilo que no busca quedar bien con los grandes intelectuales, esos que leen la revista Nexos; Notiver quiere quedar bien con sus lectores, brindándoles información precisa, novedosa y en un lenguaje con el que se sientan identificados. Notiver es un sobreviviente de los dos sexenios anteriores. Lo quisieron doblegar, pero como las palmeras de Veracruz, se doblaba, pero volvía a quedar erguido. Notiver es la noticia en el momento que sucede, es un periódico que se ha ganado cada lector a fuerza de palabras. Es por ello que al cumplir 43 años sólo nos queda regocijarnos con don Alfonso Salces, un visionario que no tiembla ante el temor de que los medios digitales destierren al periódico tradicional. Felicitaciones a todos los que de una o de otra manera hacen de Notiver el mejor diario de Veracruz.

 

Sacan a un perdedor de delegación de Segob y ponen a Montano, otro perdedor

¿Quién los entiende? Dicen que, a Ángel Isaac Ochoa Pérez, el que marchanteaba a Anilú Íngram, exdelegado de Segob en Veracruz, fue removido por sus rotundos fracasos electorales en Veracruz. Es por ello que lo mandan a Aguascalientes. Pero en su lugar ponen a Alejandro Montano, otro perdedor que quedó en tercer lugar en la elección a alcalde en Xalapa. Montano sólo alcanzó 18 mil 739 votos, que comparados con los 68 mil 886 que tuvo Hipólito Rodríguez, lo hacen verde como un “luser” de clase A. El caso es que a Ángel Isaac tenía rato que lo querían remover. Él llegó a un estado que nunca logró conocer bien. Su única encomienda era cuidar a la delegada de SEDESOL, Anilú Íngram. Es por ello que en los actos del presidente se podría olvidar de todo, pero no de apartar un lugar delante de todos, para que la delegada pudiera saludar al presidente. Huérfana quedó Anilú, ahora que no está su marchante y que llegó otro delgado al que lo que le va a importar es lucirse él, no hacer lucir a las demás.

 

Flavino sí es culpable, no importa lo que un papel diga

Flavino Ríos no es inocente, así haya conseguido un amparo federal que todavía falta por comprobar si es verdadero, si dice lo que dicen que dice, o si sólo es una artimaña de esos abogados leguleyos a quienes ya hemos puesto en su lugar muchas veces. Si bien no había noticias de la orden de aprehensión en contra de Duarte, Flavino sí sabía que el gobernador iba a utilizar ese helicóptero para huir; que no se haga… inocente. Flavino fue cómplice no sólo de la huida, sino además de muchas de las acciones ilícitas que pretendía llevar a cabo el exgobernador, pero además de muchas iniciativas en el Congreso que sí fueron aprobadas. Flavino Ríos también es culpable del estado en que quedó Veracruz. Flavino Ríos se pretendía perpetuar porque las pocas semanas que fue gobernador no le iban a alcanzar para recolectar lo que quería recolectar. Tomó el control de tecnológicos y de muchas otras dependencias a las que exprimió de manera exprés. Flavino estuvo enterado de los últimos movimientos de Javier Duarte. Pero a todo esto hay que sumarle que Flavino se echó la culpa de lanzar a los policías en contra de los jubilados. Nada más por esta última acción merece que la ley lo persiga.

 

 

Armando Ortiz                                                                                  aortiz52@hotmail.com

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