Miguel Alemán Velasco defendía las circunstancias, y decía sabiamente que la política es una ciencia de conciencia, constancia y circunstancia.
En este tenor, la actual delegada del ISSSTE, Elízabeth Morales siempre ha remado contra corriente pero siempre con la circunstancia a su favor.
Esa circunstancia que la rodea y que va acompañada de constancia es la que la llevó a ser la primera alcaldesa de Xalapa con votación mayoritaria, presidenta del Comité Directivo Estatal del PRI y dos veces Delegada Federal, de la PROFECO y actualmente del ISSSTE.
Las oportunidades muchas veces son de quien las busca pero en este caso el estar al frente de una delegación tan importante como es la del ISSSTE de Veracruz le permitió a Elízabeth acudir al Estado de Chiapas a la inauguración del nuevo Hospital General “Dr. Belisario Domínguez” en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, que inauguró el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto con una inversión de 937 millones de pesos y para beneficio de más de 350 mil derechohabientes.
La inauguración del Hospital Regional del ISSSTE de Chiapas fue con bombo y platillo pues a raíz del sismo ocurrido el pasado 7 de septiembre se aceleraron los trabajos de terminación de este nuevo nosocomio.
Del saludo del Presidente Peña Nieto a Elízabeth se supo que al llegar al lugar donde se encontraban los delegados del Instituto de la región sur-sureste, se dirigió a ella con un “Elizabeth a donde te vine a encontrar”. A lo qué ella le contestó: “señor ahora soy su delegada del ISSSTE en Veracruz”.
Cuando el Presidente se subió al presidium, donde estuvo acompañado del Director, José Reyes Baeza, desde ahí la saludó a larga distancia por su nombre y al recibir una petición de una derechohabiente que tuvo un accidente en la carretera Acayucan, el Presidente buscó a Elízabeth para solicitarle el apoyo para la señora.
Durante el encuentro Elízabeth platicó con él Ejecutivo Federal brevemente para ponerse a sus órdenes y posteriormente le hizo saber otro par de situaciones de la política veracruzana.
Posterior a esto, la delegada al igual que sus homólogos de Puebla, Oaxaca y Tamaulipas acompañaron a su jefe el Director General y al Presidente Peña a un recorrido por el nuevo nosocomio.
Se sabe que en esta visita Elízabeth fue palomeada por el Presidente, los pormenores se sabrán después. Y es que la aún funcionaria federal está muy movida con el primer círculo del Presidente Enrique Peña Nieto, quien conoce a Elizabeth por su propio nombre, situación que no pueden presumir muchos, ya que coincidieron por dos ocasiones memorables para el primer mandatario: el hermanamiento entre Toluca y Xalapa en el año 2011 cuando Elí era alcaldesa y el encendido del fuego centroamericano en los XX Juegos Centroamericanos y del Caribe, cuando era diputada federal, por lo que cuando Peña Nieto visita Veracruz el Presidente siempre se dirige en primer lugar a la ex alcaldesa como en su visita a Antón Lizardo donde Elízabeth si acudió.
En esta efervescencia electoral también se sabe que Elízabeth ha platicado y coincidido con las demás aspirantes al Senado Sonia Chirinos, Maru Pinete y Carolina Gudiño para respetarse sea cual sea la decisión.
Lo importante es garantizar la elección y no la del Estado, que también va dentro del paquete, sino la de la República con José Antonio Meade, a cuyo registro la funcionaria también asistió.
Podrán decir muchas cosas pero en esta ocasión los cuadros femeninos sobran para buscar una curul en la Cámara Alta del Congreso de la Unión. Quizá todo alentado por Elízabeth quien siempre ha defendido la equidad de género en la política veracruzana.
Al tiempo.
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