“No es difícil tener éxito. Lo difícil es merecerlo.” – Albert Camus.
Pocos son los políticos que en la actualidad pueden tener un reconocimiento por su desempeño y profesionalismo, casos de éxito en nuestro país, se dan como los garbanzos de a libra, contados.
En Veracruz, la crisis de institucionalidad tras el paso del desgobierno de Javier Duarte, sembró para siempre la duda respecto a todo aquel que pretende alcanzar el poder, pues el primer cuestionamiento al que estarán sujetos, es ¿para qué busca el poder? La respuesta en muchos de los casos será evidente, servirse, en lugar de servir.
Pero un caso que vale la pena contar, es el que desarrollo en Xalapa su alcalde Américo Zúñiga Martínez, pues el cambio y el desarrollo de obra pública, marcarán el antes y el después dentro de las administraciones municipales.
Con un presupuesto cercano a los 2 mil 300 millones de pesos en obras y acciones en beneficio de miles de familias xalapeñas, su administración sin respaldo de la administración estatal, que por cierto, la de Duarte, le robo a los xalapeños mucho del recurso destinado a obra, lo dejan como la administración que más recursos invirtió en obras y acciones.
A esto debemos resaltar que a pesar de las condiciones adversas y sin contratar un solo crédito, la obra pública está ahí, presente para aquellos que pudieron pensar que ante el escenario estatal, donde la filosofía fue robar, robar y robar, aquí se pudiera haber aplicado un símil, se equivocaron, pues el joven heredero del también alcalde Guillermo Zúñiga Martínez, tenía claro que la política y la administración pública van más allá de la tentación y el dispendio.
Este esfuerzo permitió que las propias calificadoras crediticias le otorgaran apenas este primero de diciembre en su última evaluación, un aumento a su nivel de confianza, dice Fitch Ratings que el municipio de Xalapa paso de A (mex) a A+ (mex) y manifiesta que la perspectiva crediticia de la capital veracruzana es estable. Es la segunda vez, durante la presente administración, que la prestigiosa calificadora incrementa la valoración del Ayuntamiento.
De acuerdo a los evaluadores, el aumento de calificación se fundamenta en la generación favorable de ahorro interno durante los últimos 4 años, superior a la mediana del grupo de municipios calificado por Fitch y a la expectativa de la agencia de que se mantenga favorable al cierre de 2017. Lo anterior, especifican, deriva del dinamismo en la recaudación local y el control del gasto operacional.
Un logró que pocos ayuntamientos logran llevar a cabo.
Aunado a ello, Zúñiga Martínez invirtió en una demanda y un rezago al que pocos le invierten, como es la obra hidráulica, porque al quedar literalmente enterradas, no se les puede cacarear, como otras que están ahí a la vista de todos, a pesar de ello, su administración destino más de 600 millones de pesos para construir 147 kilómetros de obras hidráulicas, más que las tres últimas administraciones municipales juntas, algo que habrá que recordar, porque equivale literalmente a la distancia entre la capital y Puebla, y más aún cuando el mismo munícipe reconoce el respaldo y el apoyo de un aliado estratégico en todas estas acciones como lo fue el presidente Enrique Peña Nieto a través de la gestoría del senador José Francisco Yunes Zorrilla.
Aun con ello, Américo Zúñiga fue más allá, la ciudad necesitaba reconstruir su imagen, sabía que su primer cuadro era por mucho el más rezagado y retrasado de los centros de las capitales del país, para ello, puso en marcha el “Programa de la nueva imagen de Xalapa”, lo que consumó la reconstrucción de vialidades más amigables para el peatón como Zaragoza, Enríquez, Primo Verdad, Leandro Valle y Xalapeños Ilustres; a las que se sumaron también Mata, Hidalgo, Manuel Doblado y los parques Zaragoza, Colosio, Hidalgo, Morelos, Farolito y la Plaza Maples Arce, todo en el Centro Histórico de Xalapa, dándole con ello, un nuevo rostro a la ciudad.
Sabedor de la presencia cultural de Xalapa para el resto del país, el alcalde busco de nueva cuenta regresarle esa dignidad como la Atenas Veracruzana con más de cuatro mil eventos artísticos, y sobre todo, con la rehabilitamos el Centro Recreativo Xalapeño, el Foro Guadalupe Balderas, el Museo Casa Xalapa y el Teatro J. J. Herrera, así también construyó el Taller de Arte Popular, el IMAC y el magno auditorio Salvador Díaz Mirón, sede de su último informe de gobierno.
Programas como Alcalde en tu Escuela, que permitió mejorar más de 400 planteles, programas como Xalapa Seguro para aquellos que puntualmente pagaron su impuesto predial y que les permitió tener acceso a un seguro en caso de eventos catastróficos, fueron en parte clave del éxito.
Es por mucho la administración municipal que más obra ha realizado, rehabilitando más de 500 calles y avenidas. 270 con concreto hidráulico, drenajes, muros de contención, guarniciones y banquetas. Vialidades estratégicas como las Avenidas Orizaba, Rébsamen, Leopoldo Kiel, Antonio M. Quirasco, Chedraui Caram, Calzada del Tecnológico, Fresnos, Porfirio Díaz, la carretera a Las Cruces y los puentes Unión y el ciclopeatonal Juventud.
Premios y reconocimientos son la evidencia del esfuerzo y la dedicación por hacer de la capital otra ciudad.
La Xalapa que Américo Zúñiga cambio, se quedará ahí como testigo fiel de que cuando se tiene dedicación y entrega la función de servir, se deja huella, en hora buena por el alcalde y su equipo de trabajo.
Ahora habrá que esperar si es que se retira de la función para atender el llamado de su partido y encarar desde otras latitudes el esfuerzo por transformar a Veracruz.
Sextante.
Mientras en Veracruz, el gobernador Miguel Ángel Yunes Linares junto a los integrantes de la Sexagésima Cuarta Legislatura entregaban un merecido reconocimiento a las fuerzas armadas de nuestro país plasmado en la Medalla Adolfo Ruiz Cortines por su apoyo irrestricto y solidario con el pueblo veracruzano en el combate a la delincuencia organizada y a la inseguridad.
Aun cuando para muchos, aquí no se hace nada, sin considerar que el incremento de la violencia es generalizado y ya colocan a la administración de Enrique Peña Nieto como la más violenta en los últimos 20 años.
El dirigente de Morena, Andrés Manuel López Obrador, salía con una más de sus brillantísimas propuestas, como está de “otorgar una amnistía a los narcotraficantes” haciendo con ello apología del delito.
Que alguien le recuerde a este señor, que quienes han intentado emplear esta pésima propuesta, han fracasado, ahí solo un ejemplo, cuando Cesar Gaviria, entonces presidente de Colombia pretendió pactar con Pablo Emilio Escobar, líder del cartel de Medellín, lo que sucedió, fue la peor época de narcoterrorismo que ese país sudamericano vivió.
Señor López, su obcecada actitud por gobernar esta nación requieren mucho más que opilar criminales en el afán de ganar simpatías y granjearse afectos.
Al tiempo.
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