Para mayor ignominia, ahora resulta que los pillos más descarados y aviesos del país piden prision domiciliaria como Duarte por sus dolencias. Estos vándalos la única enfermedad que tienen, es una gran ambición que los hizo delinquir. Cínicos, desvergonzados. De chicos jodidos, de grandes jodieron. Hay que frenarlos. No tienen límites, ni llenadera. Malo sería dejáramos llegar al Junior de Fidel Herrera, Javier Herrera Borunda, a gobernar Veracruz como pretenden. Los otros que se paguen sus medicinas, de su fortuna propia. Sus excesos son culpas propias.