La justicia Guatemalteca, de quien se burlo Javier Duarte, habla de que es un perseguido político. Se ve que a ellos también engaño y empino. Duarte no es más que un pillo cínico, inmoral, corrupto al máximo, depredador, vicioso y despreciable. Perseguido político? Bajo que modalidad? Ideología no tiene, como su ausencia de madre. Es una rata de dos patas, protegido por el sistema que lo incubó y de quién muchos recibieron grandes beneficios, del saqueo millonario del erario público estatal. Principalmente, el primer mandatario del país y otros ilustres, del primer círculo.