Nos recetó a los veracruzanos Javier Duarte, una nueva afrenta. Cínico, burlón, prepotente y haciéndose el gracioso se burlo de las leyes nacionales o eso le aconsejaron. Bravucón, el sujeto determinó al gobierno de MIYULI fallido. Ups! El tipo de marras, actuó en algo como una caja china. Pareciera que el dinero que le robo al erario público, lo utiliza para comprar conciencias. Mal queda el gobierno federal, que con la actitud del delincuente, entra el sospechosismo de la complicidad.