Un día de fiesta para los veracruzanos, porque por fin la justicia llega en el caso de un saqueador como Arturo Bermúdez Zurita. Este perverso delincuente, que maneja la defensa privada del prófugo. Al igual que su jefe, se enriqueció con el dinero del pueblo de Veracruz. Esperamos los jueces no se vendan, como en el caso León Bustos.